Su construcción data del siglo XVI y está adosada a una tramo de la antigua muralla medieval.
En la calle del Reloj destaca la puerta de su fachada principal con arco de medio punto y hornacina. El acceso a la iglesia se realiza en horas de misa, por la calle lateral Flórez Osorio. Destaca su capilla de una sola nave con artesonados en madera de castaño, de tradición mudéjar y bien conservados. El altar mayor acoge una talla policromada de la virgen de la Inmaculada que se encuadra en la escuela de Gaspar Becerra.