El Palacio Nuevo del Castillo de los Templarios sirve de enclave para la exposición permanente Templum Libri, extraordinaria recopilación de libros facsímiles, libros de autor y obras gráficas que durante siglos permanecieron ocultos en manos de coleccionistas privados, bibliotecas, universidades, monasterios y museos.
En total, un centenar de obras que han sido generosamente cedidas por el bibliófilo berciano antonio Ovalle García y que ocupan dos salas divididas según temática: códices y manuscritos religiosos en una, ciencias y humanidades en la otra. El resto de su colección, formada por más de un millar de ejemplares, permanece en la Biblioteca Templaria y Centro de Estudios Históricos del castillo. La fortaleza se convierte en un lugar de lectura, exposición, investigación y disfrute.