Una gran variedad de árboles oxigenan el municipio. Árboles de hoja perenne y caduca, árboles frutales, ornamentales y leñosos que han encontrado en Ponferrada, sus pueblos, valles y montañas el entorno ideal para desarrollarse. Citamos parte de ellos, especialmente conocidos y protegidos por la Ordenanza Municipal de Ponferrada que cataloga los árboles monumentales del municipio.
Una hermosa glicinia adorna cada primavera la fachada del Museo de la Radio de Ponferrada. En la localidad de Campo llama la atención la vertiginosa altitud de un cedro de incienso, en la finca de Valdés, y una majestuosa encina a las puertas de la iglesia de Santa María de Campo. Milenario es ya el tejo de San Cristóbal, muy visitado a la entrada del pueblo. También son destacables los sotos de castaños que encontramos en Compludo y en gran parte del Valle del Oza. El evónimo de Rimor y el nogalón de Espinoso se suman a esta enumeración de árboles longevos.